La selección de Senegal, guiada por su atacante Sadio Mané (Liverpool), se coronó por primera vez en su historia campeona de la Copa Africana de Naciones, luego de vencer a Egipto 4-2 en la definición desde el punto penalti, tras igualar 0-0 en 120 minutos.
Las grandes figuras en el tiempo reglamentario fueron los porteros Edouard Mendy para Senegal y Mohamed Abou Gabal 'Gabaski' para Egipto, quienes ahogaron en reiteradas ocasiones el grito de gol de sus rivales.
En los ataques se destacaron los integrantes del Liverpool, Mohamed Salah y el propio Mané, quienes generaron opciones, pero no lograron concretar.
El partido, a pesar de tener ocasiones en los arcos, resultó muy defensivo por parte de los egipcios, dirigidos por el portugués Carlos Queiroz; y con mayor disposición ofensiva de los senegaleses.
El portero Gabaski atajó en los primeros minutos del juego una pena máxima a Mané.
En la definición, Mohamed Moneim, de Egipto, estrelló su cobro en el vertical derecho y Mendy atajó a Mohanad Mostafa; mientras que Gabaski detuvo la ejecución de Bouna Sarr.
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