De manera agónica, el Bayer Leverkusen consiguió el pase a la final de la Europa League tras empatar 2-2 sobre el final con la Roma y así mantener su invicto. En la gran final se medirá con Atalanta, que hizo lo propio ante el Marsella.
El duelo de ida salvó a Xabi Alonso. Con el 2-0 que consiguió en la final el Bayer Leverkusen, consiguió que el marcador global terminara a su favor con un 4-2, aunque en el duelo de vuelta por poco queda fuera de la competición europea tras ir perdiendo 2-0 ante la Roma.
El día que muchos esperaban parecía llegar este 9 de mayo. Leverkusen iba perdiendo 1-2 hasta el minuto 90 frente a la Roma y los 48 duelos sin conocer la derrota iban a quedar en el camino, pero de la manera más épica, los de Xabi consiguieron empatar con un tanto al 90+7 de Stanisic.
La Roma comenzó ganando el partido al minuto 43 con un gol de Leandro Paredes de penal, el argentino que por la misma vía puso el 2-0 al 66’.
Leverkusen comenzó a ver la luz, pero sobre el final, cuando al minuto 62 Gianluca Mancini marcó en propia puerta y puso el 1-2 con el que Leverkusen a pocos minutos del final soñaba con no perder su impresionante invicto, pues en el papel la final todavía le pertenecía gracias al triunfo en la ida.
El agónico gol llegó en el último suspiro del partido, un tanto que dejó a los alemanes con un total de 49 juegos sin perder, con el título de la Bundesliga ya asegurado y con la final de la Europa League.
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