Los partidos de fútbol previstos para los próximos días en la mayoría de los estados brasileños, incluyendo Río de Janeiro y Sao Paulo, se jugarán a puerta cerrada ante el temor de la expansión del coronavirus.
La medida, que fue anunciada este viernes en los estados de Brasil, afecta los campeonatos regionales, que se aproximan a sus fases finales.
La decisión dejará sin público algunos clásicos regionales como el que disputarán este sábado Sao Paulo y Santos por el Campeonato Paulista y el que tendrán el domingo Vasco da Gama y Fluminense por el Campeonato Carioca.
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